martes, 3 de marzo de 2020

DEBEMOS ENSEÑAR CIENCIA, NO RELIGIÓN.



(Traducción de la conferencia de Nicholas Humphrey).

Ayudemos al pequeño musulmán a quien los mullahs están enseñando que la tierra es plana y exploremos con él algunas de las ideas de la geografía científica. Mejor aún, llevémoslo muy alto en un globo, mostrémosle el horizonte e invitémosle a usar sus propios sentidos y poderes de razonamiento para alcanzar sus propias conclusiones. Ahora, démosle esta elección: la figura presentada en el Corán o aquella que fluye de su recién encontrado entendimiento científico. ¿Cuál preferirá?

O tengamos piedad de la profesora bautista que se se halla en matrimonio con el creacionismo y démosle unas vacaciones. Llevémosla de paseo al museo de Historia Natural en compañia de Richard Dawkins o Dan Dennett - o, si son muy atemorizantes, David Attenborough - y hagamos que le expliquen las posibilidades de la evolución. Ahora, démosle la elección: la historia del Génesis, con todas sus paradojas y alegatos especiales, o la asombrosamente simple idea de la selección natural. ¿Cuál escogerá?

Mis preguntas son retóricas porque las respuestas ya están dadas. Sabemos muy bien por dónde irán las personas una vez que que se les permite pensar por sí mismas sobre asuntos como estos. Conversiones de la superstición a la ciencia han sido y son eventos que ocurren todos los días. Probablemente, han sido parte de nuestra experiencia personal. Aquellos que han estado caminando a oscuras han visto una gran luz: el "¡ajá!" de la revelación científica.

En contraste, conversiones desde la ciencia de vuelta a la superstición son virtualmente desconocidas. Simplemente, no sucede que alguien que ha aprendido y entendido la ciencia y sus métodos y a quien se le ofrece una alternativa no-científica escoge abandonar la ciencia. Dudo que haya existido alguna vez un caso de, por ejemplo, alguien educado para creer en la teoría geológica de los volcanes que pase, en su lugar, a creer en la cólera divina; o alguien que haya visto y apreciado la evidencia de que el mundo es redondo que regrese a la idea de que el mundo es plano; o incluso alguien que haya entendido el poder de la teoría darwiniana que vuelva a preferir la historia del Génesis.

Las personas, por supuesto, a veces abandonan sus creencias científicas existentes en favor de alternativas científicas nuevas y mejores. Pero elegir una teoría científica sobre otra es, todavía, mantenerse absolutamente fiel a la ciencia.

La razón de esta asimetría entre la ciencia y la no-ciencia no es -al menos, no solamente- que la ciencia proporciona explicaciones mucho mejores, mucho más econónimas, elegantes y bellas, que la no-ciencia. Aunque todo eso es cierto. La razón más poderosa, yo sugeriría, es que la ciencia es, por su propia naturaleza, un proceso participatorio y la no-ciencia no lo es.

Al aprender ciencia aprendemos por qué deberíamos creer en esto o aquello. La ciencia no engatusa, la ciencia no dicta; expone los argumentos fácticos y teoréticos de porqué algo es como es - y nos invita a estar de acuerdo con ellos, a verlos por cuenta propia. Por lo tanto, desde el momento en que alguien comprende una explicación científica, esa persona, es un sentido importante, ya la ha escogido como suya.

¡Qué diferente es el caso de la explicación religiosa o supersticiosa! La religión no pretende involucrar a sus devotos en ningún proceso de descubrimiento racional o elección. Si nos atrevemos a preguntar por qué debemos creer algo, la respuesta será porque ha sido escrito en el Libro, porque es nuestra tradición, porque fue suficientemente bueno para Moisés, porque irás al cielo de esa manera... O, casi con la misma frecuencia, no preguntes.

- Nicholas Humphrey ("What Shall We Tell The Children")

Ponencia original: http://www.edge.org/3rd_culture/humphrey/amnesty.html

domingo, 28 de abril de 2019

LAS RELIGIONES NO UNEN, SEPARAN.



Por lo general los cristianos piensan que su religión une a la humanidad, pero no une ni a su propia familia. Aunque han leído algunos párrafos de su libro sagrado (los indicados por sus líderes), probablemente no se han fijado, o no le han dado importancia a las palabras de Jesús cuando dijo: “…he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre serán los de su casa.” (Mateo 10: 34-36). No han notado quizás que Jesús exigía que lo amaran a él sobre todas las cosas, incluso sobre sus familiares más queridos. Advertía: “El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí” (Mateo 10: 37). Y hasta llegó a afirmar: “Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo” (Lucas 14: 26). ¿Algún cristiano que conserve su salud mental, habrá cumplido honestamente esta orden?
Y me refiero a los cristianos, porque ellos dominan nuestro ambiente occidental. Pero lo cierto es que, lamentablemente, cada vez las religiones separan más a la humanidad en un mundo donde no sólo el cristianismo existe, sino también el judaísmo, el islam, el hinduismo, el budismo, el taoísmo, el sintoísmo, el sijismo, el jainismo, el zoroastrismo, el bahaismo, el cheondoísmo, el rastafarismo, la cienciología, etc., etc. Al final, se calcula que hay unas 4500 religiones en total.
Entre éstas hay religiones teístas y no teístas. Las teístas afirman que existe un creador del universo que mantiene y gobierna su creación, mientras que las no teístas (como el budismo y el taoísmo) rechazan la existencia de dioses omnipresentes, universales o todopoderosos. Pero además hay también personas deístas y panteístas.
Sin embargo algunas religiones tienen presencia dominante. Se calcula que puede haber unos 2100 millones de cristianos aproximadamente, unos 1300 millones de musulmanes y unos 1000 millones de hindúes. Pero además se calcula que hay unas 25.000 sectas cristianas (o como ellos prefieren llamarlas, “denominaciones”).
¿Y cuál es el principal problema de todo esto? – que cada uno de estos grupos se cree el poseedor de la verdad absoluta e indiscutible, de “la única creencia verdadera”, y mira a los demás como adversarios, como “infieles”, o incluso como seres destinados a un sufrimiento perpetuo, con “llanto y crujir de dientes”.
Así que al final resultaron siendo proféticas las palabras atribuidas a Jesús, puesto que la hija con su madre, la nuera con su suegra, el esposo con su esposa, los nietos con sus abuelos, los hermanos, los primos, los tíos, están en disensión, y se consideran unos a otros “infieles”, “pecadores”, condenados al sufrimiento eterno, porque pertenecen a distintas sectas (o “denominaciones”). Uno es adventista, el otro Testigo de Jehová, el otro mormón, otro católico, otro bautista, otro luterano, otro calvinista, otro metodista, otro pentecostal… Y como resultado, ahora no pueden ni siquiera haber reuniones familiares como antes, porque cada quien tiene compromisos con su respectiva iglesia. En el pasado quedaron aquellos cumpleaños o fiestas familiares tradicionales. Siempre se escucha ahora la excusa: “Discúlpenme, pero tengo un compromiso con la iglesia”. Y claro, la iglesia es ahora lo más importante. Los miembros de la iglesia son ahora sus verdaderos “hermanos”, y la comunidad de creyentes es ahora su verdadera familia. Y por supuesto, a la iglesia le interesa controlar el tiempo de sus adeptos, porque ésta es una importante estrategia de manipulación. Por eso promueve cursos de adoctrinamiento, talleres, retiros espirituales, actividades donde los creyentes puedan estar juntos, sin que tengan tiempo para sí mismos o para sus parientes. ¡Qué lástima!

domingo, 11 de marzo de 2018

SEPARACIÓN ESTADO Y RELIGIÓN.


En España LA EDUCACIÓN ha sido siempre un monopolio de la Iglesia católica, desde que España se empezó a constituir con los Reyes Católicas, las dos instituciones que gobiernan y controlan a la sociedad son la monarquía que ostenta el poder político absoluto y la Iglesia católica que controla la EDUCACIÓN y la moral, ambas instituciones son necesarias para que la oligarquía controle y gobierne a toda la sociedad, una sociedad educada en los principios y valores que interesan a la oligarquía para controlar a la sociedad, el franquismo sociológico que aún se mantiene es heredero de este control político y educativo que ha sufrido la sociedad española donde se ha fomentado los valores patrióticos y religiosos por encima de los valores y principios de los Derechos Humanos Universales y de la JUSTICIA SOCIAL.
Este control político y educativo que ha ejercido la oligarquía más rancia y retrograda de Europa solo se ha puesto en discusión en dos ocasiones con los dos intentos republicanos derrocados por la fuerza por la oligarquía.
Con el RÉGIMEN CONTINUÍSTA DEL 78 las cosas ya no podían ser exactamente como con el dictador fascista porque había que mantener las apariencias democráticas para integrarnos en Europa, aunque solo tenemos un barniz democrático ya que no existe SEPARACIÓN DE PODERES NI SOBERANÍA POPULAR EFECTIVA si se avanzó en la educación pública, lo que ha permitido a varias generaciones educarse en unos valores más aperturistas, menos rígidos y absolutamente controlados por el rigor educativo de la Iglesia, esto ha permitido que se empiece a configurar una sociedad menos dogmática y más acorde con los tiempos que corren, aunque por contra el fomento de la EDUCACIÓN CONCERTADA que ha hecho el RÉGIMEN DEL 78 DEL PP$$€ hace que la iglesia más retrógrada que sigue controlando la enseñanza privada y concertada sea la que ha seguido educando y formando a las clases dirigentes políticas y económicas por lo que el control efectivo del poder sigue estando en manos de la España con los valores más retrógrados y anquilosados.
La Iglesia católica se resiste a perder en control y el poder que le ha dado y le sigue dando el control educativo de las élites dirigentes, incluso se resiste a perder el control y la influencia que ejerce en la educación pública con la asignatura de RELIGIÓN O LA PRESIÓN que ejerce sobre los gobiernos centrales y autonómicos para condicionar los currículum educativos para que sigan manteniendo una visión y unos principios basados en unos cánones educativos anclados en el pasado que defienden los principios de una España y de un mundo anquilosado por retrógrado y contrario a los principios fundamentales de los derechos humanos universales.
En esta situación y apoyados por los gobiernos del RÉGIMEN DEL 78 DEL PP$$€ que han sido totalmente complacientes y subalternos de los intereses de la Iglesia Católica, esta sigue defendiendo el control sobre la educación y la permanencia de unos valores y principios anquilosados y retrógrados, el divorcio, la ley de matrimonios homosexuales, el aborto o la igualdad de género son algunos de los caballos de batalla de la iglesias más retrógrada que ha ido perdiendo progresivamente con las nuevas generaciones que poco a poco van imponiendo una moral y una educación que nada tiene que ver con los valores anquilosados que sigue defendiendo la Iglesia.
Tanto el gobierno de ladrones del PP, como las fuerzas políticas de derecha, como la Iglesia, quedaron el pasado 8 de marzo retratadas frente al camino que lleva la sociedad española cada vez más alejada del anquilosamiento y lo retrógrado de los los valores que sigue defendiendo el régimen político del 78 y la Iglesia católica claramente misógina.
JAVIER QUINTERO.

domingo, 25 de febrero de 2018

FANATISMO. PLEGARIAS.



El Kaláshnikov se ha convertido en un instrumento de oración. Con cada proyectil escupe también una plegaria. Rezar y disparar. 
Nunca como hoy han estado tan unidos el bien y el mal, el progreso y el regreso de la humanidad en una confusa amalgama de religión, ciencia y fanatismo. 
Miles de millones de habitantes del planeta profesan la nueva fe en la energía nuclear sin dejar de creer en sus antiguos dioses. 

En el billete de dólar con el que se compran y se venden todas las almas se halla escrita esta súplica: ¡en Dios confiamos! 
En el inconsciente colectivo de Estados Unidos están interiorizados, como iconos de la patria, el rifle Winchester y el Colt 45; de hecho las matanzas en los centros escolares constituyen una forma de costumbrismo. 
Los profesores en los colegios, según Donald Trump, deberían impartir lecciones de ética con un revólver en la mano. 
Los yihadistas dominan las redes sociales más sofisticadas, pero gritan ¡Alá es grande! antes de ametrallar a los enemigos. 
Los judíos de Israel imploran protección a Yavhé en el Muro de las Lamentaciones, aunque sin duda fían más su seguridad a la posesión de la bomba atómica. 
Los seguidores de Buda y de Confucio son capaces de compaginar la armonía del nirvana con las leyes del capitalismo más salvaje. 
Los animistas africanos asesinan a sus congéneres de otras etnias y luego por su smartphonese enteran del resultado de la razia. 

Los millones de neuronas de nuestro sistema digestivo se encargan de provocarnos náuseas y vómitos cuando un alimento indigesto penetra en el estómago; en cambio, las neuronas del cerebro admiten sin rechazo alguno toda clase de basura. 
Lo cuecen todo en una confusa unidad, el bien y el mal, la fe, la ciencia y el fanatismo, de modo que hoy matar puede ser lo mismo que rezar. 

Se aprieta el gatillo y salen convertidas en plomo las plegarias.

MANUEL VICENT
Escritor y periodista. Licenciado en Derecho y Filosofía por la Universidad de Valencia.

miércoles, 27 de diciembre de 2017

PADRE, HIJO Y ESPÍRITU SANTO.


Las ciencias empíricas no pueden probar la inexistencia de un ser llamado “Abracadabra abracadabrante”, pues ante cualquier informe positivo que declarase no haberse topado con tal entidad, cabría siempre la respuesta de que el ser abracadabrante está fuera del alcance de nuestros instrumentos de experimentación, o incluso que no es perceptible en absoluto.
Así, la no existencia de una determinada entidad no puede establecerse en términos razonables, salvo que pueda derivarse de la imposibilidad de su existencia. La no existencia de un círculo cuadrado se deriva de su imposibilidad interna.
La no existencia de Dios estaría probada porque Dios es una entidad imposible, y lo es porque la noción que lo envuelve, la de un ser que reúne en grado sumo todas las perfecciones, es tan inconsistente como la de un triángulo equilátero con cuatro ángulos desiguales. No es concebible racionalmente que algo o alguien pueda ser a la vez omnipotente, omnisciente, sumamente bueno, justo, compasivo y providencial respecto de los demás seres libres. Hay un clásico: “Auschwitz es la prueba de no existencia de Dios. Existe Auschwitz, por lo tanto, no puede haber Dios.”

Fernando Sotomayor. CHILE.